En el jardín de primavera, los huevos de Pascua de color adornan suavemente los arbustos y la hierba, creando una escena festiva. Un alegre conejo de Pascua gambade entre las flores, trayendo un toque de magia a la atmósfera. Cerca de las pequeñas chicas y mariposas curiosas giran, agregando una dosis encantadora a esta mesa de celebración de primavera.