Sue coloca las manos sobre los hombros de Reed, como para tranquilizarlo. Reed permanece pensativo, absorto en sus cálculos incluso en reposo. Johnny, siempre relajado, enciende una llama con una sonrisa orgullosa. Ben, firme como una roca, observa en silencio tras ellos. El robot H.E.R.B.I.E. llega con un cóctel, como si todo estuviera normal. Juntos, los Cuatro Fantásticos descansan un momento antes de su próxima aventura.